Todos en algún momento de nuestras vidas hemos sufrido de lumbalgia o lumbago, pero ¿qué es y cómo se produce?
Para responder a estas preguntas primero debemos saber que partes de nuestro cuerpo son las afectadas.
Nuestra columna está dividida en 4 partes, la columna cervical, la dorsal, la lumbar y el sacro; en el caso de la lumbalgia la zona que se ve afectada es la zona lumbar y/o lumbo-sacra.
La parte inferior de la espalda es una estructura intrincada, de elementos interconectados y superpuestos:
- Tendones, músculos y otras partes blandas
- Raíces nerviosas y nervios altamente sensibles que van de la parte inferior de la espalda a las piernas y los pies.
- Articulaciones pequeñas y complejas.
- Discos intervertebrales con sus núcleos pulposos.
Una irritación o un problema en cualquiera de estas estructuras puede causar la lumbalgia o un dolor que se irradia hacia otras partes del cuerpo las cuales suelen ser las caderas o las piernas hasta diferentes niveles de las mismas.
Las lesiones más comunes en la zona lumbar suelen ser traumatismos, osteoporosis, hernias discales, artrosis interfacetarias, entre otras.
La lesión más común y que en nuestro centro más diagnosticamos es la hernia discal que produce un cuadro de dolor en el nivel de la lesión y dependiendo del grado de la misma irradiación hacia alguna de las extremidades inferiores (ciática). Según la edad este cuadro también presenta artrosis en las articulaciones interfacetarias que producen impigment e
n las mismas. En ambas patologías se ve afectada otra estructura: la raíz nerviosa, ésta es el inicio de la inervación de la cintura hasta la extremidades inferiores.
La hernia se produce cuando el núcleo pulposo se desplaza posteriormente (protrusión discal) debido a la degeneración del anillo fibroso del disco intervertebral, llegando incluso a salir del espacio intervertebral, convirtiéndose en un fragmento libre en el canal raquídeo. Esta afección suele estar asociada a degeneración vertebral, sobreesfuerzo físico o traumatismos, y es más frecuente a partir de los 30 años.
El dolor se presenta porque el disco herniado comprime los elementos nerviosos que pasan por el canal, pudiendo producir compresión de la raíz de un nervio (radiculopatía), o una compresión de la medula (canal estrecho).
La localización más frecuente de las hernias discales es la columna lumbar, normalmente en L4-L5 y, más aún en L5-S1. Y las hernias suelen producirse por la zona lateral, ya que en la zona posterior hay un ligamento (el ligamento vertebral común posterior) que es fuerte y evita las herniaciones posteriores.
En nuestro centro de Traumatologia estamos especializados en este tipo de patologías y con nuestro protocolo de tratamiento con factores de crecimiento (PRGF: Plasma Rico en Growth Factors). Es un protocolo en tres aplicaciones ambulatorias, en el cual se realizan infiltración de factores de crecimiento en la zona afectada.
Los factores de crecimiento son los encargados de la regeneración de los tejidos de nuestro cuerpo por lo que cuando hay una lesión estos son los primeros en actuar para repararla, sin embargo, hay algunas lesión en las que la cantidad aportada por el cuerpo de estos factores no resulta suficiente, es ahí donde entra nuestro protocolo. Realizamos un concentrado de sus propios factores de crecimiento que posteriormente se infiltran en la zona afectada por lo que la cantidad que infiltramos es 10 veces mayor a la que llega de forma natural a dicha zona, de este modo realizamos el mismo proceso que hace el cuerpo de forma natural pero acelerado al añadir más cantidad. Estas infiltraciones se realizan en las diversas estructuras afectadas, ya sea la hernia discal, las articulaciones interfacetarias, las raíces nerviosas y canal estrecho.
Después de este tipo de tratamiento el paciente puede realizar vida normal pero tranquila evitando esfuerzos como levantar grandes pesos y trabajos de carga; es por esto que muchos de nuestros pacientes han optado por este tipo de tratamiento evitando ingresos innecesarios y recuperaciones de larga duración por cirugías innecesarias.
En el Instituto de Traumatologia Barcelona encontrará los especialistas para sus problemas de columna.