El síndrome de fatiga crónica es una afección que produce un cansancio intenso y continuo y no se alivia con el descanso.
Se desconoce la causa precisa del síndrome de fatiga crónica (SFC). Algunas teorías apuntan a que puede darse por el virus de Epstein-Barr o el virus del herpes humano tipo 6. Otra posible causa es la inflamación en el sistema nervioso, debido a una respuesta defectuosa en el sistema inmunitario.
Factores como la edad, el estrés, medio ambiente y la herencia genética podría ayudar a su desarrollo ya que el SFC se da con mayor frecuencia en personas de entre 30 y 50 años.
Algunos de los síntomas más comunes que pueden ayudar a detectar la enfermedad son:
– Cansancio intenso y fácil fatigabilidad, incluso sin haber realizado esfuerzo físico.
– No recupera el cansancio mediante el descanso nocturno.
– Inicio repentino, a veces después de un cuadro de gripe.
– Pérdidas de memoria a corto plazo, e irritabilidad.
– Dolor muscular y de garganta.
– Fiebre leve.
– Dolores de cabeza.
– Hipersensibilidad a la luz (fotofobia).
Es recomendable que las personas afectadas tengan una vida social activa y realicen una actividad física moderada.
Se debe acudir al especialista para un diagnóstico acertado, pues en la mayoría de los estudios se informa que los pacientes tratados con programas de rehabilitación extensos tienen una mejor perspectiva de mejorasignificativa que aquellos que no reciben tratamiento.
El apoyo emocional es fundamental para tolerar un problema de salud crónico y, planear actividades y ejercicio en las horas en las que el paciente se sienta con más energía, puede ayudar al cuerpo y a la mente.